sábado, 27 de julio de 2013

Salvando a Syphon III. Danikah, Xcor, Throe, Zypher y Syphon.






Viene de " Salvando a Syphon parte II "
XCOR
*Me separo del grupo y agarro una botella de whisky, le quito el tapón y le pego un gran trago. Observo a todos moverse organizando todos y me hago a un lado, siento como todas las tensiones me han pasado factura, necesito descansar aunque sea un par de horas. Vigilo a esa hembra que habla con Syphon. Se la ve frágil en apariencia pero tiene su carácter.  Espero que mis bastardos sepan respetarla el tiempo que se quede, aun así la idea de soltarla sabiendo de nosotros no me hace ninguna gracia. Escucho la pregunta de Syphon sobre su familia, sus hermanas y algo hace que muestre un especial interés.  En ese momento Throe aparece, nuestras miradas se entrecruzan. Me acerco a la hembra*

-Tienes lista una habitación a tu entera disposición por si necesitas descansar, aunque antes quiero que respondas  a la pregunta de Syphon. ¿Quién es tu familia?-

*En el caso de que sea de la glymera tal vez podría utilizarla como rehén para conseguir una mayor influencia


ZYPHER
* Me acerco a Xcor y miro de reojo a la hembra, mientras hablo en un susurro para que no nos oigan.*

- Sire...No podemos dejarla ir... Sea quien sea esa no es una hembra de la calle. No es una civil y eso nos
puede poner en serios problemas a todos. Mi sugerencia es que la mantengamos aquí, o directamente la matemos.. Y en cuanto a Thasha... le he mandado un mensaje para que venga a alimentar a Syphon. Creo que la pérdida de sangre le ha afectado al cerebro, porque no rige.-

* Le quito la botella y le pego un trago apretando los dientes y mirando mal a la hembra. No me gusta que mi trahyner esté así por su sola presencia y no estoy dispuesto a perder a mi mejor amigo por culpa de una hembra insulsa.*



THROE
* Desde donde estoy oigo a Zypher y gruño desde la distancia.  No me lo pienso. Dejo a la sanadora con Syphon y voy flechado hacia Zypher y Xcor*

- Si le tocas un pelo a la hembra te  rompo los dedos Zypher. -

* Le amenazo directamente retándole con la mirada*

- No sé qué cojones te ha entrado con esta hembra, pero te controlas y la tratas con respeto. Porque ella ha salvado a nuestro trahyner, y sin ella, él estaría muerto desangrado. ¿Te entra en la sesera o te lo hago entrar a golpes? -

* Me acerco hasta que solo me separan de él unos centímetros*

-Ni pienses en hacerle daño, Zypher. O el siguiente serás tú en mi lista de  arreglos -

*Doy un paso  atrás, manteniendo la mirada de los dos, expectante, en guardia. Me dirijo a Xcor*

- Si decidís matarla, será sobre mi cadáver. Y si decidís que se quede, será si ella quiere. Nunca he forzado a una hembra a hacer nada que no quisiera y no voy a empezar a hacerlo ahora. Ella es mi responsabilidad porque la traje aquí, así que lo que tengáis que decidir sobre ella, primero lo habláis conmigo-



DANIKAH
*De pronto sin casi darme cuenta todos se han alejado y me he quedado sola con el guerrero herido y voy retrocediendo cuando noto que las voces se van levantando en el trío de machos, el guerrero rubio se había puesto tenso y lo supe. Supe que era por mí y porque no querían dejarme volver y mi corazón da un vuelco, debía hacer algo, quizás confesar mis orígenes ayudara para que me liberaran. Vuelvo inconscientemente la mirada al catre y mis ojos quedan fijos en los del guerrero y contengo el aliento. Me estremezco sin poder contenerme ante la crudeza que veo en sus ojos que me recorren con un atrevimiento que a pesar de todo me hacen ruborizar con fuerza ante el descaro.

Debía detenerlo, me dije asustada, debía poner distancia, alejarme, dejar de sentir esta tibieza y cualquier sentimiento o emoción que despertara.
Resuelta y con una expresión rebelde suelto el aire contenido y me pongo mi máscara. Me aclaro la garganta logrando que todos voltearan a verme y con el mismo tono calmado y altivo que sabia y sentía que molestaba digo alto para que todos escuchen*

- Mi nombre es Danikah...no hembra, tampoco sanadora. Soy Danikah y si quieren agradecer a alguien deben hacerlo a mis hermanas elegidas -*escucho que todos contienen el aliento y levanto la barbilla* - o mejor aún...Al Primale de nuestra raza *finalizo con altivez que estaba lejos de sentir, pero solo yo sabía cuan asustada estaba, como el pánico crecía dentro de mi*



SYPHON
* Creo que me he quedado blanco al escucharla. Ese rico tono de voz saliendo de esos labios tan turgentes...si no fuera por lo que acaba de decir, creo que habría entrado en una especie de semi trance. ¿Cómo puede solo la voz de una hembra sumirme en ese estado? Imbécil. Es una elegida. ¡Una elegida! y yo que siempre creí que eso era una falacia.  Por eso me  parece la hembra más hermosa  que mis ojos hayan visto alguna vez. Trago saliva e intento pensar aunque me siento más débil que una lechuga*

- ¿Una elegida? Una de las  de la Virgen...-

* Dirijo mi mirada hacia Throe y a Xcor. Xcor está mirando de forma extraña a la hembra...y Throe la mira horrorizado. Es el más devoto de la Virgen  de nosotros. Ella está asustada. Lo huelo. Lo veo. Y no pienso dejar que se vea afectada, no después de salvarme ni después de ver en sus ojos el brillo de todo lo que  es bello. Elevo mi mano y me muevo hasta conseguir tocarla y ella voltea su mirada hacia mí. Por fin consigo que me mire. No deja de apartar la vista cuando me mira. Debo ser una abominación para sus ojos.*

- Danikah...elegida o no me has salvado la vida y estoy en deuda contigo. Pero creo que presentar mis respetos al Primale está descartado. Tú no sabes quienes somos nosotros, ¿cierto?-

*Un instinto de protección brutal crece en mí y tiro de ella hasta que la tengo cerca de mí. Miro a Xcor*

- Elegida  o no, está bajo mi protección. Ahora estoy débil y pido que  uno de vosotros me sustituya como ghardian mientras esté aquí. Pero en cuanto pueda ponerme en pie, yo pasaré a ser  su ghardian mientras esté con nosotros.-

* Trago saliva. Si es una elegida...no va a estar mucho tiempo aquí, van a rastrearla enseguida*

- Tenemos  que irnos de aquí. Van a aparecer de un momento a otro para rescatarla siguiendo la llamada de la sangre. El jodido Primale debe estar ya loco buscándola-

* Pienso en  ese maldito vampiro y solo me entran ganas de matarlo. Dice la leyenda que el primale se aparea con todas las elegidas y cada una de ellas es considerada shellan del mismo. Gruño fuerte *


XCOR
-Throe siempre el atento caballero.-

*Sonrío torcido y tiro de mi botella recuperándola de las garras de Zypher que gruñe. Pego otro trago hasta que la hembra habla y me quedo sin respiración*

-¿Una Elegida? ¡Joder, Throe! ¿Podrías habérselo preguntado antes de traerla no crees?-

*Me paso la mano por el pelo y lo que noto en los ojos de Syphon ya me golpea de lleno*

-Guárdate el instinto protector, Syphon, nadie tocará a esta hembra sagrada. Nadie. Es una orden.  Y maldita sea, tendremos que marcharnos cuanto antes-

*Miro a la hembra y ahora me recrimino porque me tendría que haber dado cuenta que esa pose tan familiar me recordaba a ella, a mi Elegida de cabellos de oro. ¿Se conocerán? Sin duda. ¿Le habrá hablado de mí? Seguramente no. Podría utilizarla para llegar a ella. Mis pensamientos vuelven al presente cuando Syphon gruñe  de nuevo*

-Tranquilo. Nos marchamos ya.-

*Empezamos a recoger todo lo más rápido posible*



ZYPHER
* Giro los ojos en blanco al oírla decir que es una elegida y pienso que si no estábamos bastante jodidos antes, ahora sí que lo estamos, porque esta hembra es un jodido rastreador de carne y hueso... Gruño y empiezo a recoger mis pocas pertenencias y metiéndolas en un petate y cabreado la miro.
Las elegidas traen problemas...*

-Vosotros haced lo que queráis, pero yo no pienso poner mi culo al alcance del súper PRIMALE don YOSOLOFOLLOCONMISHELLAN ¡¡ Me voy!!! Y guapita...que sepas que no soy de la misma opinión que el resto de mis compañeros.

Si nos traicionas, te sacaré tu bonitos ojos y te cortaré la lengua para que no puedas decirle a nadie donde has estado.-

* Gruño y salgo, pegando un portazo.Maldita hermandad, malditas elegidas y maldita sea la madre de la raza.... Nosotros tenemos tanto derecho como la hermandad a ser alimentados por esas hembras, pero no se nos considera más que parias, y peor desde que Syphon puso Una bala en el real cuello del monarca Warth.*



THROE
* Ruedo los ojos porque Zypher anda más alterado que otras veces. La amenaza a la elegida no me ha gustado nada y estoy decidido a saber porque la ha hecho. Estamos hablando de una elegida por la Virgen! Se las venera, no se las amenaza. Me giro hacia ella y hacia Syphon que me mira...con ojos raros y con los colmillos fuera. No le doy importancia*

- No te preocupes Danikah, no va a ocurrirte nada. Me ofrezco a ser su Ghardian hasta que te recuperes Syphon. Y si luego no quieres asumir su guardia, con gusto lo seguiré siendo mientras esté aquí con nosotros. Os dejo un momento  que tengo que chequear algo en otra habitación. Os dejo solos, pero sé que Syphon está bien contigo y tú no debes temer nada de él, por lo que he visto...dará su vida por  cuidar de la tuya-

*Inclino la cabeza en señal de reverencia a la elegida y me  marcho detrás de Zypher. No he querido alterar a la hembra diciéndole donde voy de verdad*




DANIKAH
*Todo pasó en un segundo, cuando volví la mirada el lugar estaba vacío y me encontraba sola con el único macho al que realmente le temía, pero no porque me hiciera algo, sino porque despertaba en mí cosas que no debería sentir.

La piel de mi brazo aún hormigueaba donde su mano se había posado. Abro y cierro la mano tratando de hacer desaparecer la sensación de calidez.

Sacudo la cabeza y vuelvo a mirarlo poniendo en mi rostro la acostumbrada mascara de frialdad. No sé porque me habían dejado sola con él. Tomo mis manos para que no note el temblor mientras busco qué decir, pero nada sale de mis labios debido a la intensa mirada que recibía del guerrero.
Carraspeo y me ruborizo sin acercarme y de mis labios salen palabras que debería haber callado*

-No deben preocuparse porque me rastreen, nunca he sido llamada para alimentar a nadie -*confieso la verdad que antes me ponía feliz pero ahora al escucharla no me hacía sentir tan bien*




SYPHON
* El pecho se me hincha de orgullo, de un sentimiento de satisfacción desconocido cuando oigo esas palabras. Al mismo tiempo me extraño ante ellas. El que nos hayan dejado solos me facilita el poder acercarme más a ella. Sigue tensa, la veo tensa y huelo su incertidumbre...pero al menos no me mira con miedo. Sigue con su expresión rígida, seguro que es porque no me considera digno de estar cerca de ella...pero nunca he sido uno que huya de los retos. Al contrario. Como me llamo Syphon que conseguiré que esta elegida me mire como a un macho normal*

- ¿Nunca has alimentado a nadie? ¿Nadie de nadie?  -

* Siento que la parte baja de mi cuerpo se tensa y los puntos recién puestos se estiran y me duelen un poco. Pero no digo nada. La virgen me libre de hacerlo y asustar a la hembra que ahora es capaz de mirarme a los ojos*

- Siento si no te trato con la reverencia que sé que se os debe profesar. Soy un macho mundano, nada formal. Lo siento. Si prefieres que no te tutee, lo entenderé. –

*Trago saliva y siento la garganta seca* -Sólo conozco las leyendas que oí de pequeño de las elegidas, pero creía que  erais escogidas para servir a la Virgen y  la élite  de guerreros de la hermandad- *carraspeo al decir las últimas palabras, casi se me atragantan. Servir significa servir todas las necesidades de un  macho y espero que ella entienda lo que quiero decir. La esperanza de que ningún macho la haya tocado me llena de una esperanza que no conocía. ¿Porque me afecta tanto esta hembra? ¿Su cercanía. Tan fría como el hielo pero que siento que es un bálsamo para mi*



DANIKAH
*Me tenso un poco más cuando noto la incredulidad y algo más que no supe reconocer en su voz cuando pregunta si no he alimentado a nadie y me obligo a no bajar la mirada, levanto la barbilla desafiante pero sus siguientes palabras me hacen contenerme y darme cuenta que es solo curiosidad. Me acerco un poco más sin pensarlo pero aun manteniendo una distancia prudencial como para que no vuelva a tocarme cuando le vuelvo a hablar mi voz no suena tan fría como deseaba*

- Nunca he alimentado a ningún guerrero, solo he servido a nuestra madre.

*Respondo atrapada por sus ojos y volviendo a acercarme hasta que algo me hace entrar en razón, detenerme. Por la Virgen!! Que tenía ese macho que sentía...simplemente sentía, me sentía más viva que nunca desde que entré en la estancia y eso nunca me había pasado, sin decir que me tenía aterrada* Mi nombre es Danikah, ya lo he dicho, así puede decirme si lo desea *finalizo yo misma marcando distancias en un esfuerzo que en el fondo sabía que sería vano*



SYPHON
- Danikah es un nombre precioso,  como la elegida que lo lleva-
*Sonrío al hablarle y enseguida me arrepiento cuando veo como  se estremece ante mis palabras. Ya la he vuelto a asustar, creerá que soy un maldito macho barriobajero. Tampoco anda desencaminada, pero con ella...no quiero  portarme así. Espero que eso no haga que retroceda ante mí ahora que  ella había dado un paso acercándose. Trago saliva para medir mis palabras y no  asustarla*

- Que no hayas brindado nunca tu sangre lo hace todo más fácil.-

*Miro hacia la puerta y veo pasar por delante a Balthazar.*

-¡Primo! Dile a Xcor que no  tenemos que mudarnos...no podrán rastrearnos con la hembra. No ha servido nunca a ningún macho.-

*A Balthazar se le iluminan los ojos con  una lujuria que conozco demasiado bien y le enseño los dientes  gruñendo*

- Ni lo sueñes siquiera. Esta fuera de tu alcance.-

*Vuelvo a poner mi atención en la elegida  y luego entrecierro los ojos al pensar en una posibilidad*
- ¿Porque es cierto eso de que no has servido nunca, ¿verdad? No estarás metiéndonos para que te encuentre la hermandad, ¿verdad?-




DANIKAH
*Me sobresalto cuando escucho su grito a alguien que pasaba y vuelvo a retroceder como si me despertara, notando que estaba demasiado cerca del catre, demasiado cerca suyo.
Pero su pregunta finalmente se filtra y hace que me tense mirándolo altiva y un poco dolida por sus palabras*

- Porque habría de mentir? -

*digo con voz ronca humedeciendo mis labios, meneo la cabeza*

-Yo no miento- *finalizo mirando fijamente sus ojos que me provocan otro estremecimiento porque podría jurar que ven dentro de mi alma...que ven mis miedos*



SYPHON
*Me reacomodo en el catre, buscando la postura para que los puntos no tiren de mí.*

- No era mi intención molestarte, elegida  Danikah, pero no llevamos vivos tantos años por ser descuidados y confiados. Quizá el lugar de dónde vienes es tranquilo y seguro, pero esto...Es todo menos eso. Y todo el mundo miente si con ello gana algo.-

*Entrecierro los ojos estudiando su lenguaje corporal y veo que  está tensa. De repente mi estómago ruge y la necesidad visceral de ser alimentado hace que  me duela incluso en la sangre. No es una sensación desconocida para mí, siendo miembros de esta banda, pocas veces nos alimentamos cuando corresponde. Gimo de dolor y ella me mira consternada*

-Lo siento, pero el hambre es dolorosa. Eso no debes saberlo tú, ¿verdad? *Mi tono sale recriminatorio y enseguida me arrepiento, pero ya han sido dichas las palabras.*



DANIKAH
*Sigo tensa con sus palabras, pero cuando escucho su gemido y veo su expresión de dolor, todo se me olvida, inclusive la fría mascara de mi rostro y me acerco preocupada, justo en el momento que sus palabras me golpean, porque el sentimiento con el que son dichas es innegable.

Llevo una mano a mi garganta y tontamente mi visión se nubla. ¿Que me estaba pasando? Desde cuando unas palabras podían afectarme tanto? Muerdo mi labio y me obligo a responder sin que me importe conservar la calma o ser educada...o siquiera seguir intentando con frialdad que estoy lejos de sentir cerca del guerrero*

- ¿Vais a culparme por eso? -*la voz sale ronca y levanto la barbilla* - No...No sé lo que es eso -*digo aunque ya conocía la respuesta*



SYPHON
*Estudio su reacción y parece genuina. Me fastidia hacer esto a algo tan bello y frágil, pero no he confiado en nadie en toda mi vida, solo en mis primos y mis trahyners.*

-No voy a culparte por no saberlo, eso no es asunto mío ciertamente. Y te pido disculpas si eso te pareció-. - *la miro y creo que es el momento de intentar algo, lo que sea. Me muero por tenerla más cerca, Me muero por saborearla, que maldiciones.*

- Veo tu preocupación.  ¿Quiere decir eso que  tu si accederás a alimentarme a mí?-
*Intento que no se me vean los colmillos que ya se han alargado ante la expectativa. Joder, Estoy hambriento y todo me duele y mi sangre la reclama. Pero tengo que contenerme y esperar su respuesta.*




DANIKAH
*Su expresión es lo que me pone primeramente alerta pero nuevamente sus palabras golpean de lleno en mí, no solo sus palabras, su pedido mismo me hace estremecer porque mi mente grita con voz firme ¡¡CORRE!!, mi cuerpo se niega a moverse.
Mis ojos se agrandan y la sangre corre rápidamente por mi cuerpo y mi cabeza niega*

- Yo...-*busco aire*- no puedes pedirme eso- *mi sangre bulle y mi corazón se acelera, giro mirando a salida*

-Yo...no puedo- *mi voz sale casi como un ruego*- nunca alimenté a nadie... -*miro sus ojos* -estarías demasiado cerca -*susurro* -demasiado cerca…-



THROE
*Cuando entro otra vez en el cuarto, después de preparar las cosas para la elegida,  la cara de susto de la hembra casi hace que me caiga sobre las rodillas. Todos mis instintos de protección se me disparan. Me acerco a ella rápidamente y la cojo por la cintura apartándola de Syphon*

- ¿Qué está pasando? ¿Estás bien Danikah?-

* Miro a Syphon que me observa... ¿Enseñándome los colmillos? *

- ¿Qué es lo que te pasa? No te hemos dado ningún sedante como  para que andes haciendo tonterías. Y como es que la has asustado tanto? Ven conmigo Danikah, creo que necesitas que te dé un poco el aire.

* La cojo por encima del hombro y empiezo a llevármela hacia la puerta. Me giro hacia Syphon que se ha incorporado Le hago señas de que no se mueva*

- Me nombraste su ghardian hasta que te recuperaras, y estoy haciendo mi trabajo. Cuando volvamos espero una explicación a esto.




SYPHON
* Lo mataría. Ahora mismo mataría a uno de mis camaradas por llevarse a la elegida lejos de mí. Gruño pero ya no están, ya salieron por la puerta.
 ¿Pero qué he hecho? ¿La he asustado tanto? ¿Tan salvaje y barrio bajero me ve que estando débil, no puede concebir el quedarse sola conmigo? La lengua y mi carácter son mi perdición.
Miro al techo y respiro profundamente.
¿Qué es lo que me está pasando? ¿He soñado ese Mía que creo que he sentido y oído en mis entrañas? El pecho me duele  de tristeza al sentir que esa hembra solo quiere estar separada de mí. Alejada.
Y yo solo la quiero tener cerca.

El ruido de pisadas en el pasillo me avisa de que mi  trahyner, el rubio dandi ya vuelve hacia mí. Y entra como una tromba en el cuarto, parándose delante de mí, mirándome con las fosas nasales dilatadas y cruzándose de brazos. Le  reto  sin parpadear siquiera, extendiendo mis colmillos.*

- Di lo que tengas que decir. No voy a poder irme a ningún lugar de todos modos.-




THROE
*Con los brazos cruzados lo miro negando*

- ¿Que qué quiero yo? Yo no quiero nada, pero al menos ella no debería parecer un pollito asustado cada vez que la miras. ¿A qué estás jugando Syphon?-

*Mi trahyner me mira sin retirar la vista de mis ojos y sigue con los colmillos extendidos*

- Mala idea Syphon la de mostrarme los colmillos. Tienes suerte de que sea yo y valore a esa hembra más que ninguno de nuestros camaradas, porque si no te molería a golpes, incluso con lo débil que estás.-

*Syphon cierra la boca y mira  por encima de mi hombro como sopesando la respuesta. Una que ya me sé por la forma en que la estaba mirando cuando me la he llevado*

- Es muy mala idea siquiera pensarlo Syphon. Esa hembra está fuera de tu liga, ¡diablos! Esta fuera de nuestra liga. Ni siquiera yo con todo mi linaje soy digno ni de que respire en la  misma habitación. Olvídala, no te traerá más que problemas. Y si ella no quiere  estar cerca de ti, no puedes obligarla. Está por encima de ti y de mí. Solo el rey y el Primale están por encima  de ella y ni yo llevo gafas negras ni tú tienes una melena tricolor.-

*Avanzo un paso y coloco mi mano sobre su hombro. Él la mira resignado*

- No somos más que los bastardos del blloodletter. No tenemos derecho a nada. Y menos a ella. Cuando todo esto haya pasado, la llevaré de vuelta con  sus hermanas. Diga lo que diga Zypher o Xcor.  Ahora trahyner, descansa y recupérate, saldré fuera con Xcor y Zypher a ver si encontramos una hembra para ti.

* Asiento con la cabeza y dejo a Syphon sentado, observándome mientras salgo de la habitación*




SYPHON
*Cada palabra es como un látigo que golpea con fuerza, no por la intención ni por lo que significan, sino porque son la maldita verdad. Asiento no muy convencido, pero Throe tiene razón. Que no me guste oírlas es otra cosa. Y el muy maldito me ha leído todo el rato el pensamiento.*

-Aye. - *Bufo resignado*-  En momentos como este es cuando me pregunto si tomamos la decisión correcta en su momento de seguir al Bloodletter. -

*Throe se encoje de hombros y me mira con cierta tristeza. Se da la vuelta y camina hacia la puerta, es su forma de decirme que me controle y que confía en que haré lo correcto.*

- Que tengáis buena caería trahyner.  Esperare a que me traigáis a esa hembra para mí...estoy famélico. No te preocupes Throe, sabré controlarme. -

*Throe desaparece de mi vista en un segundo y sus pasos se alejan .Y yo me siento  un jodido estúpido.
Pero ¿por qué no puedo quitármela de la cabeza? ¿Porque  cuando cierro los ojos ella es lo que veo? He conocido a muchas hembras, muchas...diría que demasiadas, pero ninguna me afecta como ella, y muchísimo menos las recuerdo. Está a unas habitaciones de distancia, poniendo todo lo que puede en medio de nosotros, intentando alejarse de mí todo lo posible.
Esto es una mierda, pienso dejándome hundir en el colchón de mi catre.*


Continua en " Hambre"



Licencia de Creative Commons
Rol Paraiso Destherrados is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.

0 comentarios:

Publicar un comentario