EL regalo. Blay y Qhuinn.

ATENCIÓN: SOLO PARA MAYORES DE 18 AÑOS. CONTIENE ESCENAS DE ALTO CONTENIDO SEXUAL Y LENGUAJE ADULTO. HOMOERÓTICA.


QHUINN
Me seco el pelo con una toalla al salir de la ducha , maldiciendo al imbécil del lesser que ha conseguido herirme  esta noche. En el espejo  de pie de la habitación observo mi reflejo. Mierda,  parezco un  mapa,  Y Jane a duras penas me ha dejado salir del centro médico. La promesa de cuidarme  yo mismo  y mantener reposo hasta mañana en la cama,  ha conseguido darme la libertad .  Entrecierro los ojos valorando  mi  imagen  en el espejo   y tuerzo la boca tocando el mayor cardenal  de todos, el  de   la costilla derecha, con los dedos  mi mano izquierda. Mierda, duele de verdad.

En ese momento oigo a mi espalda la puerta que se abre y levanto mi rostro hacia ella. El aroma  que huelo enseguida activa mi cuerpo, y yo sin toalla alguna con la que cubrirme, solo puedo esbozar una sonrisa traviesa al ver ese pelo pelirrojo  en el umbral de la puerta.

- Hola Nallum-



BLAY
Joder estoy nervioso, Quinn salió de patrulla esta noche mientras yo estaba fuera de rotación, esta era una de esas raras ocasiones en que no salíamos juntos a patear calles pero a mí me vino como anillo al dedo.  Las horas después de que los hermanos salieran, me dedique preparar una velada mas intima para que mi macho y yo  pudiéramos compartir la última comida y darle su regalo.

No quería que Quinn me pillara de improviso, así que decidir montar todo en la que había sido su habitación, coloqué velas por todos los rincones, sábanas negras de seda y una botella de champagne.   

Las fuertes risas y el ruido de botas anunciaron que los hermanos habían vuelto, espere a que mi hellren subiera a ducharse, como siempre hacía, pero tardo tanto que la preocupación ocupó todos mis pensamiento.

Volví a nuestra habitación para saber si había llegado y la vista de su cuerpo desnudo hizo que una ola de calor me inundara, estallando en crudo deseo,  hasta que pude ver el mal estado en que se encontrar.

-Pero que te ha pasado-  susurro sin saber que mas decir. 


QHUINN
Me encojo de hombros  ante su pregunta y le sonrío. Sé perfectamente hacia donde me está mirando y esa misma  parte se eleva saludándole.

- Lo de siempre, un jodido lesser con aires de superioridad. Le he mandado al dhund con su hacedor. - Termino de secarme el pelo con la toalla y avanzo unos  pasos  hacia él sonriendo de lado. Está preocupado y su mirada demasiado fina en mis cardenales. Tengo que hacer que se olvide de ellos. Agarro su nuca  y le acerco para poder invadir su boca. Sus labios me reciben con hambre, los míos le piden mas y el aliento de uno y el otro se  mezcla.

Me separo un poco  y le miro a los ojos, deslizando mi pulgar  en sus labios.

- ¿ Y tu?  ¿que has hecho en tu noche  libre?




BLAY
Lo encierro en un enérgico brazo mientras me besa,  la sensación de alivio que siento cuando lo tengo entre mis brazos al terminar la noche creo que no se irá nunca, no importa el tiempo que pasemos en la guerra.Su pregunta me hace respingar, casi había olvidado lo que tenía preparado.

- ¿Por qué no te poner algo de ropa y vienes conmigo?- su mirada llena de curiosidad me hace sonreír. -Seguro es mas divertido arrancarte esos trapos después- digo ronroneando y empujándole un poco para que se ponga en marcha y espero que no note el nerviosismo en mi tono.



QHUINN
 Enarco una ceja divertido y preguntándome porque me quiere sacar de la habitación cuando estoy gloriosamente desnudo y listo para follarlo.

- ¿ de verdad no me prefieres así ? - Abro los brazos ofreciéndome-  No entiendo como me prefieres con ropa a desnudo - Chasqueo la lengua provocándolo. Le veo tragar saliva y moderse el  labio inferior. La sonrisa aparece en mi cara no solo ladeada, si no  prometiendo mucha maldad - Ya tiene que ser muy bueno lo que quieres enseñarme  para quererme vestido  y fuera de la habitación- El traga duro y yo me río. Me acerco y le agarro del trasero, frotando mi dolorida polla en su pantalón, susurrándole al oído - Espero que valga la pena Nallum porque no me corro ahora mismo porque la Virgen se ha apiadado de mi. Menuda boca tienes-

Le suelto de golpe y me dirijo hacia el armario riendo por lo bajo, dándole la espalda, ofreciéndole una buena visión de mi culo.¡ Ah! Como me gusta provocar a mi macho .Mientras,  abro el  mueble y me voy colocando un pantalón negro  de chandal y una camiseta  negra . Me   paso  la mano por el pelo aun revuelto para peinarlo  y me calzo unas sandalias. Me vuelvo y encuentro su mirada hambrienta posada en mi cuerpo.

-  Estoy Listo -



BLAY
 Esto ha sido una putada, Qhuinn siempre es tan malditamente provocativo y sensual que te tenido que atarme en corto las ganas después de la exhibición descarada que ha hecho de si mismo. Pero estoy seguro que si le pongo una mano encima , el juego habrá terminado y la sorpresa se irá al carajo. Me prometo mentalmente que después habrá tiempo para saborear toda esa piel bronceada.

Le tomo de la mano tirando de él hasta la puerta y por el pasillo, cuando llegamos a lo habitación contigua, me lanza una mirada de sospecha, seguro esta muerto de la curiosidad.

Me coloco a sus espaldas y cubro sus ojos con mis manos, me presiono contra sus nalgas para que vea lo encendido que me ha dejado y cuando sisea, le susurro al oído.

-Espero que te guste hermano, felicitaciones. 


QHUINN
Intento mirarle  de reojo elevando una ceja desconcertado  cuando me dice " hermano" y eso contrasta con su polla pulsando en mi trasero.  Y me excita mogollón. Pero abro los ojos como platos cuando retira sus manos de mis ojos  y veo todo lo que me ha preparado.
Sin palabras.
El jodido Blay ha vuelto a dejarme sin palabras que pronunciar porque mi  lengua no responde a ningún estímulo cerebral en este momento. Trago saliva para aliviar un poco la sequedad de boca y me doy la vuelta hacia mi Nallum.

- ¿ y esto?  ¿Esto porque?-  Su cara es  para mi como un faro en la niebla y sin querer evitarlo, la cojo entre mis manos y le beso  con suavidad. Una suavidad que promete mucho mas después. - No tengo ni idea de  a que viene esto pero joder si no me gusta que pienses en mi para estas cosas. Nadie nunca se acuerda de mi y tu siempre estás demostrándome  siempre lo importante que soy para ti.-



BLAY
Mi corazón se estruja en mi pecho, cuando lo escucho decirme aquello, sé que con su familia nunca recibió demostraciones de amor ni de cariño, por lo que es tan importante este gesto ahora que yo soy su familia.

- Esto es para felicitarte por convertirte en parte de la élite guerrera de protección a la raza, y por que ellos te escogieron no por tu linaje sino por tu valía como  macho, por tu coraje y tu lealtad- le digo desplegando mi mejor sonrisa.

Me mira con los ojos muy abiertos, mientras junto nuestras bocas en un beso posesivo, mostrándole sin palabras lo orgulloso que estoy de él.

Le invito a que se siente en la pequeña mesa colocada en el centro de la habitación y le entrego una aflautada copa de champagne.

-Por ti - susurro sin despegar mis ojos de los bicolores. 



QHUINN
Entrecierro los ojos divertido y levanto la copa después de aceptarla,  respondiendo a su brindis ya sentado.

  - Por los dos. Si brindas solo por mi traerá mala suerte - No le permito responder. Doy un sorbo a la copa y le miro por encima del borde. Sus hombros se mueven de tal manera que ya me veo acariciándolos, junto a sus brazos que resaltan debajo de su ropa.Esos bíceps con los que me deleito cuando se que él no mira.

- Gracias por esto Blay, siempre sabes como hacer las cosas y cuando hacerlas. - Miro la  mesa. Si, hay comida, pero lo que quiero meterme en la boca ahora mismo no es eso...sonrío malvado y me  acomodo en el asiento , dejando la copa de cristal sobre la mesa . Dicen que la espera hace que  el placer crezca. Espero que este valga la pena, porque tengo mis huevos a punto de reventar debajo del chandal. Y hablando de chandal, parece una maldita tienda de campaña.  No se si Blay lo ha visto ya que la mesa me cubre, espero que sí.  Sonrío enseñándole unos colmillos mas que extendidos.

- Comamos ya o te comeré a ti, tu decides -


BLAY
Jamás me cansaré de esa sonrisa caliente como el demonio que mi macho me lanza cuando está  desesperado por tenerme, pero Fritz se ha esmerado mucho con la comida y si lo dejo seguir ahora, cuando las cosas empiecen a calentarse no creo que podamos parar.

Me siento frente a él y destapo una bandeja con varios tipos de carnes y mariscos a las brasas; los olores inundan la habitación, y paso la lengua por mis labios con deleite.

-       Alimentarte es mi placer Nallum – sonrojándome levemente levanto el cubierto con un delicado corte de carne que aun humea. -   Come de mi mano - susurro, mientas toma la comida entre sus labios sin despegar nuestras miradas. 

No puedo creer que este simple gesto sea  tan jodidamente excitante, Qhuinn empieza a respirar duro y la lujuria prende sus ojos. 



QHUINN
No creo que consiga terminar de comer sin lanzarme sobre la mesa y mandarlo todo al suelo. Abro la boca y Blay mete el trozo de carne en ella.Sonrío  al pasarme la lengua por mis labios y sus dedos, chupándolos y lamiéndolos con la lengua. Parezco un jodido actor porno.

-  ¿Me tratas como a una  hembra Blay? ¿ alimentándome?.- la risita  lasciva sustituye a mis palabras. Y ahí voy de nuevo atacando cual depredador en su papel de cordero a ver si le hago perder el control - Y yo que quiero comerte otra cosa...-

Se muerde el  labio inferior y yo abro las piernas,  una invitación muda de algo que ambos deseamos. Escancio de nuevo ambas copas y le ofrezco una al mismo tiempo que él me ofrece otro bocado.

- Por nosotros otra vez y por  mas últimas comidas  de estas-



BLAY
 Suelto una sonora carcajada, mientras pienso que si ya nos es muy difícil salir de la cama a cumplir con las patrullas. No me imagino lo que tendrían que hacer los hermanos para separarnos el uno del otro si tuviéramos mas veladas románticas.

Me inclino sobre la mesa todo lo que puedo para lamer un poco de salsa que ha quedado de su ultimo bocado, pero me retiro rápidamente antes de que pueda profundizar el beso y acabe con la poca fuerza de voluntad que me queda a estas alturas. Estoy tan duro como mi macho.

- Será que me gusta tentarte Nallum- digo, mientras Qhuinn frunce el ceño. Bajo la mesa estiro mi pierna para rozar la suya y tomo una frutilla con chocolate en la punta de la boca, ofreciéndosela descaradamente. 


QHUINN
Muestro mis colmillos con descaro yo también- Ahora si nos entendemos, Blay - En medio segundo estoy sobre la fruta, en un cuarto estoy devorando sus labios chupando el jugo  que se escapa de su comisura. Me separo cuando ya no hay nada que comer, sonriendo libidinoso. Ante todo hay que mantener el juego vivo

- Mas mi Nallum-

La punta de sus dedos  frota  mi entrepierna que está mas dura que un bate de baseball y del mismo tamaño casi. Podría clavar clavos con ella.

- Si, si, eso es por ti, así que apresúrate a terminar con la comida que te he dicho ya que me quiero meter otra cosa en  la boca-


BLAY
No puedo evitar sonrojarme cuando dice cosas así, pero ya es suficiente de juegos. Tiro de su brazo hasta ponerlo a horcajadas sobre mis piernas, enredó mi mano en su cabello para juntar nuestros labios desesperadamente. Mientras la otra navega por su espalda bajo la tela de su camiseta.

Me estremezco cuando deja caer todo su peso sobre mis piernas y nuestros miembros mas que dispuestos se acarician al ritmo de los movimientos de cadera de mi macho. 

-Te deseo - digo en un susurro ahogado, cuando muerdo su oído y me dirijo a su cuello, besando la vena que va directo a su corazón. Cuando hundo mis colmillos milímetro a milímetro el cuerpo de mi  hellrem, se afloja mientras yo lo saboreo a pequeños tragos. Los dos estamos a punto de estallar con las pelotas duras como acero. 



QHUINN
Mis manos aferran con fuerza de los hombros de Blay y su mano en mi espalda envía miles de señales eléctricas directas a mi saco, tensándolo.  Coloco mi cuello expuesto, para que profundice en mi carne y mis caderas se mueven como locas solas, frotándose contra su entrepierna .

Y yo aun con pantalones, menuda putada.

Jadeo para llenar de aire mis pulmones antes de moverme con determinación, sin separarme de él y  sus tentadores colmillos. Siento como mi sangre pasa a su boca y es drenada con maestría. Y yo sigo maldiciendo por llevar los pantalones puestos.¡ Bah! Al infierno con los convencionalismos.  Como puedo, meto la mano entre nuestros cuerpos y desabrocho la pretina de sus pantalones. Busco hasta alcanzar esa barra dura y suave que me tienta. Joder, solo con sentir el hierro y el terciopelo caliente  estoy a punto de perderme.

Con mi pulgar esparzo la gota que siento en la punta de su glande y sonrío. Casi me corro yo pero me concentro. Esto ahora es para él.  Me concentro en sentir como mi sangre le llena y como mi mano le acaricia la polla y se desliza con suavidad, ahora  arriba y abajo, al mismo  ritmo que sus caderas ahora imponen. Se estremece antes de sentir su arteria  hincharse y tensarse.

- Correte nallum...Córrete ahora para mi-

Será una guarrada hacer que se corra con los pantalones puestos, pero anda que no me pone cachondo provocar que Blay haga lo impensable.


BLAY
La posición es un tanto incómoda, pero a la mierda es mi macho quien me toca y todo mi cuerpo responde a su llamado.

 Me despego de su vena con un gruñido,  la sangre se derrama por el costado de su cuello hasta su camiseta, pero nada puedo hacer cuando siento como todo mi cuerpo se tensa, estoy a punto de correrme. Tomo su boca con desesperación mientras exploto en esa mano complaciente.

Cuando las sensaciones remiten, me doy cuenta que Quinn sigue bombeando, sin darme tregua, lo que me enciende nuevamente.

- Ahora tómame- susurro mientras me levanto de la silla, llevándolo conmigo y caminamos aun besándonos hasta caer sobre la cama, con las piernas enredadas.

Esto es lo mejor de mi macho, su pasión no tiene limites y siempre es generoso con sus virtudes.  


QHUINN
Jadeo  mirándolo detenidamente. Su expresión de antes es lo que deseo recordar  ,  cuando cierro los ojos al acostarme y me duermo...su cara de éxtasis puro al estallar entre mis manos. O en mi cuerpo. Da igual el lugar, lo que quiero es complacerlo. Y si me pide que le tome...por la Virgen que le tomaré enterito.

Agarro su pelo por la nuca y  empiezo por sus labios. Sin tregua, sin concesión alguna, invado su boca con la mía y mi lengua juega con la suya ante su complaciencia. Mi cuerpo cobra vida ante el contacto de nuestra piel aun separada por tela. Me exaspero y me separo abruptamente de su boca y su agarre jadeando.

-  ¡ Fuera ropa, Joder! ¡ Me estoy volviendo loco sin poder tocarte como quiero!

Ante su atenta  y oscura mirada y con su respiración acelerándose, le quito primero la camisa y luego los pantalones por las piernas. Creo que los botones se han ido a tomar por saco por la urgencia de mis movimientos...pero ¿ a quien le importan unos botones cuando lo que deseo acaba de saltar  frente a mis ojos mas duro que un mástil?   Es increíble mi macho que  vuelve a estar duro por mí. Sonriendo  lobuno, me quito mi remera  y  me arranco casi el chandal del tirón  que le pego al bajármelo con urgencia.

Me muestro en toda mi plenitud ante Blay-- Ahora... estas perfecto Nallum-



BLAY
 Tiro del brazo de mi macho, hasta que se coloca entre mis piernas abiertas y nuestras bocas se vuelven a encontrar. Nuestras erecciones se acarician mutuamente, gracias a los suaves movimiento de sus cadera.
Mis manos se deslizan por su amplios hombros hasta su culo, toda esa piel desnuda esta acabando con la poca cordura que me queda, lo quiero todo de él.

Levanto las caderas para que la fricción aumente, y en un segundo los gemidos que salen de mi boca son tan audibles que me avergüenzo. Mi macho esparce besos a lo largo de mi cuello, chupando donde es necesario.

- Mierda...-  jadeo. La sangre hierve en mis venas, y lo único que pasa por mi mente es  que necesito que me marque, estoy apunto de irme, pero aun falta algo para que placer sea completo.

- Muerdeme.... ahora... -la desesperación inunda mi voz, no puedo creer que cada vez que hacemos el amor se sienta mejor.




QHUINN
Suelto el aire que contengo y lamo justo donde voy a cumplir sus deseos, sobre la piel de la vena que lleva la sangre que quiero.  Me contoneo y  me froto  contra su cuerpo porque quiero sentir cada centímetro  mientras me hundo en su carne, quiero que mi aroma impregne cada célula de su piel  y quiero que su cuerpo lleve mi marca para que todos sepan de quien es este macho.

Mis colmillos penetran , atraviesan  tejido hasta llegar a su vena que  succiono sediento. Sediento de él, sediento de sangre, sediento de vida. Ha sido capaz de darme mas de lo que le he pedido nunca, yo quiero ser capaz de darle lo que ninguno ha sido capaz de darle. Ni  siquiera Saxton.

La sangre me hierve en las venas y cuando el rico líquido cae por mi garganta,  mi cuerpo ya no puede controlarse. Busco con mis dedos   su entrada y esparzo parte de su semilla que aun está en mi mano,  en ella. Se que no es suficiente así que le penetro con mis dedos para dilatarlo. Su gemido hace que no pueda contenerme y beba mas de él, mi otra mano de nuevo le acaricia  y le masturba. ¡Joder! No se como voy a soportar no correrme yo. Con mis dientes en su cuello y su sangre en mi boca, quiero que me lo dé todo ahora.


Lo penetro con mis dedos acelerando el ritmo y quiero que se venga de nuevo, quiero que se derrita entre mis manos y conmigo dentro. Ahora son mis dedos, luego será  con  todo  yo .Su pene se engrosa en mi mano y se pone duro  a punto. Lo noto. Me separo un momento de su cuello, jadeando.

- Damelo todo Blay, tu sangre, tu semilla, tu cuerpo...¡tu alma!

Muerdo de nuevo con el regusto metálico de su sangre en mi boca , y bebo y bombeo  hasta que lo llevo otra vez  al orgasmo y se derrama gritando y gimiendo  en mi mano.

Su corazón  late a mil por hora y ese es el momento en que paro de beber y salgo de él y de su entrada.  Mi macho necesita recuperar fuerzas y por Dios que se las voy a dar yo. Lamo su cuello para cerrar las heridas y esparzo todo lo que me ha dado por su entrada . Mis manos se colocan  por debajo de sus rodillas, abriendo sus piernas para mi, colocándole en una posición mas que satisfactoria para los dos, porque quiero mirarle a los ojos cuando lo tome.

Levanto  sus caderas y me posiciono en su entrada. Gruño porque sus ojos me están matando con lujuria contenida y su respiración entrecortada me  excita hasta no poder mas.

- Van dos amor. Y quiero que sean tres-

Entro en su interior, en el ángulo perfecto para  entrar de una sola vez, sin interrupciones  involuntarias de sus músculos. Me toma hasta el fondo y gimo cuando su calor me rodea.

-  Eres el puto cielo, Nallum. Márcame, soy tuyo.-

Me inclino sobre él para exponerle mi cuello y me cuesta horrores hacerlo sin venirme. Pero quiero hacerlo cuando él lo haga otra vez. No descansaré hasta dejarlo exhausto y satisfecho.


BLAY
No puedo resistirme a su invitación, mientras hundo mis colmillos en el lado de su cuello, la sangre sale a borbotones llenando mi boca, derramándose por la comisura de mis labios. Mientras Qhuinn empieza con un vaivén controlado que le permite hundirse profundamente en mi interior, dejo que el dolor inicial pase y el absoluto placer de la posesión lo substituya.

Mis manos en sus nalgas dirigen el movimiento que cada vez es mas rápido y profundo, puedo escuchar los jadeos entrecortados de mi macho junto a mi oído, mientras la absoluta estimulación de todas las terminaciones nerviosas de mi cuerpo hacen que mi polla vuelva a la vida nuevamente.

Sello las heridas en el cuello de mi hellrem, cuando siento que se incorpora para mover con mayor libertad su cadera, haciendo que las estocadas sean  mas profundas. Estoy a punto de correrme de nuevo, cosa que no creí posible, pero he aprendido que uno nunca debe dudar de las habilidades de un amante como Qhuinn.

Siento como todos mis músculos se tensan y empujo la cabeza contra las almohadas mientras digo su nombre en voz alta y una corriente me recorre.

- ¡ Córrete conmigo! - le digo, tirando de él mientras nuestras bocas se unen y siento como me vacío y me lleno al mismo tiempo. Qhuinn se mantiene con un bombeo irregular mientras se corre varias veces.

Mis brazos caen a mis costados, como si me hubiese extraído la esencia de la vida .Esto es tan absolutamente placentero.


QHUINN
 Aire. Necesito aire y a poder ser reanimación.  Respiro y afianzo mis rodillas contra el colchón, sujetando aun a mi Nallum por las piernas y mirando su   cara embelesado.

Lo reconozco, doy pena para ser un macho pero este tipo me tiene cogido por las pelotas.  Sonrío como un cabrón y estoy  satisfecho...que digo, mas que satisfecho al ver en su cara el enrojecimiento del buen sexo y el rubor de una buena corrida. Me dejo caer sobre él y ni a tiros me sacan ahora de su cuerpo. La mejor sensación de todas es  tenerle a mi alrededor apretándome y haciéndome suyo. Huelo la  piel de su cuello,  tan bañada en sudor como la mía.

- Hueles a mi Nallum- Eso lo digo  expandiendo mi pecho de orgullo . Me huelo  luego a mi mismo  -  Y yo huelo a ti. Como tiene que ser. -  Salgo de su interior y me recuesto a su lado, abrazándolo contra mi -  Prométeme que será siempre así nallum, siempre...-  susurro en su cuello, besándolo  -  me has dado el mejor regalo, y no me refiero a la cena , me refiero a tí .




BLAY
Con el calor del cuerpo de mi macho alrededor, estoy tan a gusto que seguro me dormiré de un momento a otro. Cuando nuestras respiraciones se han acompasado, extiendo la mano hasta el cajón de la mesita de noche junto a nuestra cama y saco el regalo.

-Esto también es para ti-, digo girando para poder mirarlo frente a frente. Sus ojos se abren con asombro y curiosidad, mientras pongo la pequeña cajita negra en su mano.

-Sé que no es gran cosa- murmuro algo nervioso. –Pero me gustaría que lo lleves contigo siempre, para que recuerdes que siempre estaré aquí para ti.



QHUINN
  Abro los ojos aun sin saber que decir y abro la cajita negra. Me quedo perplejo mirando el interior y una sonrisa bobalicona se me instaura en la cara como si estuviese ahí desde siempre. Saco el objeto brillante y se lo tiendo a él sin palabras , solo con una petición en mi mirada. Sabe lo que quiero. Quiero que me lo ponga él.

Me derrito casi cuando se incorpora en la cama y observo cada movimiento que hace con esa gracia que me tiene enamorado. Ahora mas, porque está a punto de colocarme algo que me delatará de su propiedad ante todos y maldita sea si eso no es erótico.

Es una simple pieza de joyería masculina, pero para mi va a ser como otra parte de mi cuerpo...que le pertenece a él. Miro como lo desliza en mi muñeca y me quedo anonadado. Un reloj, un magnífico reloj del que no puedo quitar los ojos.

- Blay, esto...esto es...-  Las palabras no son mi fuerte pero otras cosas si. Mis dedos se aferran a su pelo y le atraigo hacia mi boca . Sus labios son ambrosía pura y decadencia absoluta y los devoro, porque quiero devorarlos y dejarle claro lo que no sé decirle con palabras .

- Nallum, prepárate porque no vas a dormir nada este día...-


FIN DE ESCENA....


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