MANUEL
¡Con una palmada, miro la mesa y sonrío, viendo que todo ha quedado a la perfección.
El pavo está en su sitio, el vino servido, y el árbol listo. La chimenea nos proporciona calor, y sonrío como un crío, recordando las Navidades que pasaba con mi madre.
- Mira Bambina, así es como celebramos los humanos la víspera de Navidad. Natale, il compleanno di Gesù...
Butch asiente con la cabeza, moviendo su copa de Lagavulin y Marissa se ríe.
- No te rías, hembra. Porque después de este banquete, os pienso llevar a la misa del Gallo.- Mi hermano estalla en carcajadas y me tira un trozo de pan y lo esquivo por los pelos.
-Eh, mestizo. Un poco de respeto por mis creencias cristianas, que por cierto, son las mismas que las tuyas.- Me acerco a Payne y rodeo su cintura con mi brazo pegándola a mi cuerpo y hundo mi nariz en el hueco de su garganta.
-Estas preciosa, bambina. Piu bella, la mia dolce ragazza. -Susurro antes de posar un beso en su cuello.
PAYNE
Cierro los ojos disfrutando del roce de sus labios en mi piel sonriendo
- Me miras con ojos de enamorado Nallum, pero sigue así...adoro esos ojos tuyos-
Sus labios buscan los míos y recibo un beso suave, dulce. Luego se separa y abro los ojos para encontrarme con las miradas de mis cuñados políticos sonriendo y enrojezco
- Lo siento...yo... ¡qué diablos! vosotros también andáis haciéndoos arrumacos por los pasillos-
Risas entre todos. Es una noche especial para Butch y Manuel, y sólo por eso ya vale la pena celebrarla. Yo no sé qué es eso de la navidad, solo la teoría y a Marissa le pasa igual, aunque ya lleva más tiempo con Butch y es una experta en rituales.
- Marissa y yo hemos dejado una mesa bien bonita, ¿eh? Si no hubiera sido por ella, estaríais comiendo en platos de plástico. No tengo ningún sentido de la decoración- Me muerdo el labio y alargo mi brazo y cojo una de las cerezas que adornan el pavo. La pruebo y asiento con placer. Está exquisita
- Cocináis estupendamente chicos, ha valido la pena que estuvierais todo el día en la cocina para esta cena -
Miro el reloj. Son las ocho de la noche. - ¿La misa del Gallo es a las doce, no? St Patrick estará lleno de gente, Butch ¿ es mejor llegar antes o mejor en punto para quedarnos atrás y no levantar miradas indiscretas? -
Pienso en cada vez que salimos los cuatro por la ciudad. No hay vez que no se nos queden mirando.
MANUEL
Miro a mi bambina, y sonrío embelesado, y me río cuando dice que si nos dará tiempo a llegar y que la gente siempre se nos queda mirando.
-Nos miran porque nos envidian. Ninguna humana puede ser tan bella como tu... .-Butch tose contra su puño, llamándome cabrón y rectifico.- No hay mujeres humanas tan bellas como vosotras.
Mi Payne sonríe y cogiéndola de la mano la guio hasta la mesa.--Venga, vamos a comer antes de que se enfríe, pero antes... -Voy hacia el equipo de música y pongo una selección de villancicos adaptados al metal y me rio al ver sus caras.
-Siempre es más divertido cenar con música. - Nos sentamos los cuatro a la mesa y Butch bendice la cena, mientras yo junto mis manos y cierro los ojos.
Las dos hembras nos miran extrañadas y sonrío cuando mi hermano termina la oración.
-Es una costumbre cristiana, dar las gracias por los alimentos que vamos a tomar.-
PAYNE
Sonrío cálidamente - Me parece muy buena idea eso de agradecer por la comida. Le diremos a Wrath que nos lo deje hacer cuando estemos en la primera comida todos juntos .
Marissa estalla en risas y yo me encojo de hombros sin entender. Cuando me explica que Wrath odiaba a los humanos y sus costumbres hacen apenas cinco años abro los ojos. Miro a mi Nallum y a su hermano. Marissa se ríe más. Dice que quiere ver la cara de Wrath cuando yo se lo pida...porque no cree que nadie más tenga el valor para hacerlo. Yo me encojo de hombros otra vez.
-Pues lo haré yo. Como me grite o gruña le pegaré un bufido que lo moveré del trono ese de maricona que tiene. Aun no le perdono que me siga tratando como a una hembra a veces.- Manuel carraspea para que deje el tema y lo entiendo. Estamos en Navidad y para los humanos es época de paz.
- Oye Butch y para cuando nos vas a hacer tíos?- Butch escupe el vino que estaba bebiendo y Marissa se atraganta con la comida.
- ¿ qué? No me digáis que no lo habéis pensado. Yo seré un desastre como mahmen, pero Marissa es un amor. En lugar seguro lo demuestra con los niños continuamente.
MANUEL
Miro a mi hermano fijamente por encima de mi copa de vino y alzo una ceja cuando empieza a balbucear. ¡¡¡ No me lo puedo creer!!! ¡¡¡ Mi hermano, el vampiro, balbuceando.
- Eso me gustaría a mi verlo. Se te dan bien las armas, hermano, pero me gustaría verte lidiar con unos pañales.
Sirvo un poco de puré de patatas en cada plato, guisantes y carne con salsa y empezamos a comer.
-Yo no sé mucho sobre los embarazos de los vampiros, pero estoy practicando con esa hembra, Layla y parece ser que ambos, están encantados. - Miro a Payne y sonrio.*
-¿Y nosotros, cuando?
PAYNE
Ahora la que me atraganto soy yo. Y necesito de vino, agua y zumo para terminar de toser. Marissa palmea en mi espalda y Butch se ríe entre dientes.
- Nallum,¡¡ no me des esos sustos!! - Veo la cara de circunstancia de Manuel y me siento culpable.
- Nallum...ni siquiera me lo he planteado. Aún estoy tratando de convencer a Wrath y T de que me acepten en la hermandad.. - Creo que mi explicación empeora las cosas - Hablaremos de ello luego, vale...pero no tenemos que preocuparnos. -
Me encojo de hombros y me río . Le doy un bocado al plato que Manuel ha servido.
- ¿ Te imaginas un Manuel pequeñito corriendo por ahí con mi mala leche? ¡ Vishous tendría un ataque cardiaco! ¡¡ Nallum, creo que tenemos que tener muchas crías para que mi hermano sepa lo que es tener sobrinos!! Y si Marissa y Butch se ponen de acuerdo con nosotros , podemos llenar el Pit de Vishous de sobrinos, pañales, y juguetes de goma que pondrán los pelos de punta a mi hermano. - Me río fuerte- si, definitivamente tenemos que tener crías, nallum-
MANUEL
Me río y esta vez al que le toca que le palmeen la espalda es a mí, pero del ataque de risa que me entra imaginándome a un montón de mini Manueles con los ojos brillantes jodiendo a V hasta la saciedad
-¡¡¡Me apunto a eso!!!! Jesús!!! Sí que me apunto!!!
Butch ríe con fuerza y me tira un trozo de pan y Marissa también se ríe y miro sus platos casi vacíos.
-Venga, ahora probemos esto.Que no sé qué es exactamente, porque es una receta Made in Manello, pero estáis autorizados a escupir si no os gusta.- Les paso una especie de soufflé relleno de bacon y gambas y pongo cara de circunstancia, esperando que les guste.
-Por cierto, ¿ Dónde está pasando las fiestas Vishous? Porque estoy por llamarle y encasquetarle un gorro de papa Noel y llevármelo a la misa del gallo.
PAYNE
Elevo las dos cejas incrédula.
-Creo que antes se dejaría cortar un testículo que acompañarte a algo así. - Butch enarca una ceja y Marissa suelta una risita. He obviado conscientemente decir " el ultimo testículo" pero una dama como yo no dice esas cosas de su hermano mayor. Bueno, no en público.- Está en el Commodore con Jane si no me equivoco. Jane quería celebrar ese día con él de forma especial. Donde tenemos que llevarle es a un concierto de esos de heavy metal que a ti te gustan. El día de la epifanía del señor toca un grupo de Caldwell en el centro comunitario del st Patrick. Es para recaudar fondos para el orfelinato. ¿ Iremos Nallum?
Pregunto ilusionada. Butch me mira alucinado.
- ¿ qué pasa? -
Le pregunto y me responde que esta alucinado porque yo sepa cuál es el día de la epifanía. Marissa suelta una carcajada y aclara que se ríe porque le hace gracia que a Butch le sorprenda lo de la epifanía y no que yo sepa lo del concierto de heavy metal. Me encojo de hombros devorando unos canapés.
- me gusta estar informada de las cosas que le gustan a mi Nallum. Así puedo hacerle feliz y si él es feliz, me hace feliz a mí.-
Entre risas terminamos con la comida y pasamos los postres. La comida ha estado deliciosa y yo estoy ansiosa por enseñarle mi regalo a Manuel.
- ¿ Sacamos ya los regalos?-
MANUEL
Divertido dejo los cubiertos y me levanto a por los regalos y empiezo a repartirlo, reservando el último para mi bambina. Se oyen las risas de Butch y de Marissa y me encojo de hombros.
-No sabía que regalaros, y como tengo ganas de que me hagáis tío os he regalado eso.
- Y ahora el tuyo, mi bella ragatza.- Le tiendo el regalo envuelto en papel dorado a Payne y me repantigo en la silla, esperando a que lo abra.
-Y me gusta la idea de llevarte a tu hermano a un concierto de metal. Seguro que será mayor tortura para el eso, que llevármelo a la misa del gallo. - digo con una carcajada.
PAYNE
Abro los ojos como platos emocionada. Esto de los regalos creo que es la parte que más me gusta de la navidad. Eso y estar los cuatro aquí juntos, de forma tan distendida.
Antes de abrir una caja de terciopelo negro preciosa, me obligo a detenerme. Me estaba olvidando de mi Nallum y los demás con el mío. Le tiendo su regalo a Manuel y luego un paquete enorme para Butch y Marissa.
El regalo de Manuel está en una cajita pequeña y una bolsita. Me aguanto la risa imaginando su reacción al verlo.
Le he dejado una réplica en forma de miniatura en una caja con la llave del original debajo. Manuel me observa con expectación a que abra su regalo, y yo embobada no me niego.
Abro la caja roja y el aliento se me queda atorado en la boca cuando veo una pulsera de oro blanco preciosa y compacta en ella. Como a mí me gustan las cosas. Saco la joya de la caja y veo que tiene eslabones parecidos a cadenas y una especie de placa con el de Manuel . Enseguida sonrío como una boba.
-¡¡Así puedo llevar tu nombre en mi cuerpo!!- Me lanzo a los brazos de mi Nallum como loca.
MANUEL
Abro la boca y vuelvo a cerrarla al ver el regalo de mi bambina y Butch me quita la cajita de las manos, completamente alucinado.
Santo Jesús! Y yo comprándole una pulsera.Se me cae la cara de vergüenza y enrojezco hasta la raíz del pelo.
-Payne...Yo...no sé qué decir, nena...Esto es... Joder, es demasiado... -
Me acerco a ella y la rodeo en mis brazos, levantándola de la silla y la beso con pasión, totalmente azorado, y luego hundo mi cara en su pelo. -¿Enserio me has comprado un coche? -
* No sé qué decir. Marissa y Butch cuchichean a mis espaldas y me siento perdido.*
-Yo ...Dios... Payne.... -
Butch se acerca a mí y me dice que me calle y que no la cague más y me rio, con las llaves en la mano.- -Bueno, pues si ya está todo listo, podemos probar esta maravilla, para llegar a Saint Patrick, ¿no? - Todos se ríen y sin soltar a mujer, shellan como dicen los vampiros, miro las llaves del coche.
PAYNE
Sonrío como boba...otra vez. Que ridículo esto de estar enamorada y sonreír como una estúpida todo el tiempo.
- ¡Claro que podemos! - Me acerco a él y acuno su rostro - Lo que me has regalado es lo más importante en mi raza Hellren mío. TU NOMBRE para mí. Me has regalado lo más preciado que puede tener un vampiro y además me tratas como un guerrero de valía, que es lo que siempre he deseado que todos hagan - Suspiro - Quizá para ti eso sea menos importante que cualquier objeto material, pero para mí tu Nombre es mucho más valioso que un coche. - Miro la pulsera y me la coloco enseguida en la muñeca - Llevaré tu nombre en mi cuerpo con todo el honor del mundo Nallum. Y lo del coche va con trampa...quiero que me lleves hasta el fin del mundo con él!-
Marissa y Butch detrás de nosotros carraspean y yo enrojezco como un tomate. No hemos abierto el regalo que ellos han dejado sobre la mesa para nosotros. Me separo de Manuel besando sus labios y dejo que él recoja el paquete. Lo hace sonar primero y se queda perplejo.
- ¡Ábrelo y saldrás de dudas! -
Digo más ansiosa que él. Observo como abre el paquete y saca dos Ipads con sus fundas, perfectamente ordenados. Grito de entusiasmo. Butch me explica que V le ha ayudado a configurarlos para que estén conectados entre sí. Y que tiene unas cuantas aplicaciones creación de mi hermano que nos encantaran.
Abrazo a mis cuñados con cariño.-¡Son fantásticos!
MANUEL
Me quedo embobado mirando los regalos de mi hermano y de su shellan y me emociono como un crío. Siempre desee una familia, y ahora que la tengo, para mi es mi mayor regalo.
Aprieto a mi bambina entre mis brazos, con las llaves del coche en mi mano y aunque quiero que la voz me salga serena, no lo consigo, ya que la emoción hace que me alga casi como un maullido.
Todos se ríen y me aclaro la garganta.
-Gracia a todos por compartir esta fiesta tan especial conmigo. Y ahora, nos vamos a Saint Patrick...Y ni mu en la misa del Gallo que la quiero ver entera. -
Salimos todos del apartamento y cierro tras de mi la puerta, con la emoción corriendo como adrenalina por mis venas y cojo la mano de Payne entre las mías.
-Gracias por estar a mi lado conmigo esta noche, ma bella e picola ragatza. -
La beso dulcemente y tras oír las protestas de mi hermano, bajamos a la calle y tras subirnos a mi nuevo coche, ponemos rumbo a la catedral.
Mientras conduzco sonrío como un bobo pero lo mejor va a ser mañana, cuando arrastre al capullo de mi cuñado hasta el concierto de metal. .
-FIN DE LA ESCENA-
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