BELLA
- Ha sido una noche fantástica, Zsadist. – giro mi rostro para besar la frente de mi hija antes de mirar los ambarinos ojos de mi macho. – No puedo creer la suerte que tenemos.
En momentos como este todo el amor que sentía por el inundaba mi pecho llenándome de orgullo por tan maravilloso macho, un padre espectacular que siempre tenía lista una sonrisa para su hija y nunca permitiría que nada ni nadie pudiese hacerla llorar.Aprieto mi agarre a su cintura y seguimos caminando en una lenta procesión hasta la habitación de nuestra hija.
ZSADIST
Caminamos abrazados hasta la habitación de Nalla, tener a mi hija en mis brazos me hace sentir el vampiro más protector, el más orgulloso y el más feliz del mundo, Bella me mira con esos adorables ojos color Zafiro y un ramalazo de deseo me recorre
- Leelan la noche no ha acabado y tengo un par de cosas más que mostrarles