En la calle y juntos. Payne y Vishous.

VISHOUS
- No me puedo creer que este haciendo esto – Muevo la cabeza de un lado a otro negando, aún no me creo que me haya ofrecido a esto.



PAYNE
-¿Hacer el que? ¿Acompañarme ?. Te estas portando como un buen hermano.-



VISHOUS
 Bajo un poco la cabeza sin apartar la mirada de mi hermana.

-Ya me entiendes Payne. ¡Mierda santa! Nunca creí que llevaría a mi hermana pequeña a un lugar como este, hay que joderse.-



PAYNE
-Te recuerdo que no soy tu hermana pequeña, nací antes...y un lugar como este no debe ser tan malo cuando muchos humanos vienen aquí y seguro que tú lo has estado haciendo durante mucho tiempo.-

Exponiendo sentimientos. Anabelle y Danikah

Anabelle
*Me desmaterializo frente a la enorme casona. Sabía que todos los machos estarían patrullando y solo estaría Danikah. Deseaba hablar con ella. Ya lo habíamos hecho en varias oportunidades y estábamos empezando a crear una amistad.Era muy bueno tener a alguien con quien hablar  sin tener que medir lo que decía

Veo que sale a recibirme sonriendo y la abrazo con afecto*

-Espero que mi visita no interrumpa algo que debías hacer Dani -

* Ella niega y ambas entramos a la casa, nos dirigimos a la cocina que estaba cálida y los aromas indicaban que algo sabroso llenaría los estómagos de los guerreros esta noche*


Danikah
*El mensaje de Anabelle no me había sorprendido, me gustaba hablar con ella y según Syphon algo estaba pasando con Throe y ella. La curiosidad me picaba un poco.*

-Me encanta poder hablar con alguien Anabelle, tu visita siempre es bienvenida. Tengo café caliente y unas pastas que he preparado... Hoy me metí en la cocina *río explicando, sirvo el aromático café y coloco con cuidado el plato de pastas, me siento enfrente * Han pasado cosas desde que nos vimos por última vez verdad?-

Un nuevo candidato. Payne, Throe y una sorpresa.

 PAYNE
Miro hacia delante y bufo de nuevo.

Otra vez. Otra maldita vez que Tohrment me vuelve a  colocar  cómo  guardaespaldas de una hembra para que  pueda salir de compras o a hacer lo sea fuera  que de la mansión. En circunstancias normales, me daría igual, es mas, me encanta ser útil...pero que Xhex y yo seamos  a las únicas a las que manda estas tareas,  y  al resto de machos les envie a patrullar ...eso me cabrea. Mucho.

Esta vez ha sido Ehlena, la shellan de Rehvenge, que al parecer no tiene nada mejor que hacer que acudir a una de esas  reuniones  de  ex compañeras de trabajo  . Menos mal que son civiles y no tengo que soportar a ninguna aristócrata; me dan ganas de sacudirlas a bofetadas cuando empiezan con sus tonterías. Ehlena es de la Glymera, pero su comportamiento es totalmente distinto al resto de sus congéneres. Ella es amable y generosa. Y me mira de forma normal.

Me mantengo  un paso por detrás de Ehlena mientras ella entra y se reune con sus amigas en una cafetería cercana a la clínica de Havers. Al parecer, son  sus antiguas amigas enfermeras y estas reuniones las hacen una vez al mes

Le echo un ojo alrededor, y no  detecto peligros potenciales; tres humanos en un rincón quejándose del precio de la gasolina,  dos hembras humanas también en  la otra esquina despotricando de sus machos ( para que están con ellos si se sienten tan infelices?) y en el otro extremo, las civiles con  Ehlena, que ya está sentada entre ellas contándose anécdotas.

No hay nada peligroso aquí dentro y yo me estoy asfixiando.

Me acerco a Ehlena y le digo al oído

- Estoy en la puerta, vigilando el perímetro. Cualquier cosa, pega un grito-

Ella me mira de reojo y asiente resignada. Ha intentado que me sentara con ellas; al parecer mi aspecto y el hecho de que  sea su guarda espaldas, les ha fascinado tanto, que alguna me ha pedido hasta un autógrafo.  No entiendo  a las civiles.  Y me gustaría, porque veo que se lo pasan muchísimo mejor que las aristócratas y que mis hermanas elegidas.

Salgo a la calle y me quedo  apoyada al lado de la puerta, mirando al frente pero con los sentidos en todas partes.

Nada relevante, solo los ruidos de Cadwell de noche.

Así pasan los minutos hasta que llega a mi nariz un tufo que conozco al segundo.

Lesser.

Y demasiado cerca de la clínica.

Eso es malo, muy malo.

Asunto delicado. Wrath y Phury.

PHURY
*Me materializo en la mansión y tras saludar a Fritz, voy en busca de mi hermano Wrath. Ando por los pasillos hasta llegar a su despacho y llamo con los nudillos, esperando no interrumpir nada.

Oigo a George ladrar y sonrío a la vez que paso el peso de mi cuerpo de un lado a otro para no sobrecargar la pierna.

Cuando al final la puerta se abre, entro y me sorprendo al ver al rey masajeándose las sienes recibiéndome  A pesar de las gafas oscuras, puedo ver por la postura de sus hombros que está cansado y me acerco, agachándome para rascarle la cabeza a George.*

- Tienes mala cara, hermano... ¿No duermes? -

*Luego voy con él hacia el escritorio y me siento en el butacón frente a él *


WRATH
- Tu siempre tan observador -

*Respondo al mismo tiempo que vuelvo a mi silla detrás de mi mesa. Una mesa que ahora ya no significa para mí lo mismo; ya no es un estorbo, es más bien un aliciente para cambiar las cosas.*

- Gracias por acudir tan pronto a mi llamada, Phury. -* Estiro el cuello que noto más que tenso.*- Y sí;  no duermo una mierda porque mi hijo se empeña en que no lo haga berreando como un loco. Y encima me aleja de mi shellan porque se le ocurre llamarla cada vez que quiero estar a solas con ella. Y como fatal porque Fritz se ha empeñado en que aparte de cordero, en mi dieta debe haber algo más ahora que hay que dar ejemplo al príncipe ¡Como si Jr se enterara de algo! -* bufo* - Como ves, todo bien, Gracias - *Respondo esbozando una mueca sarcástica.

Me sé de memoria el camino y la ubicación de las cosas de mi despacho, así que tan pronto me siento, suspiro aliviado*

Mensajes durante el dia. Throe y Anabelle.

Anabelle vien de aqui
Throe Viene de aqui



THROE

* Me miro en el espejo tratando de aclarar tanto mis ideas, como mi cara. Lo de Zypher me ha afectado, pero maldita sea si dejo que se me note.

Tantos años juntos, cazando codo con codo, salvándonos el culo el uno al otro...¿ para qué?

Inspiro aire y la vibración de mi móvil me saca de mis pensamientos.

¿ Un mensaje? ¿ Quien demonios me envía a mi un mensaje a estas horas?  Aun no he empezado mi campaña para conseguir adeptos que apoyen mi candidatura a la corona como para estar recibiendo mensajes.

Sonrío como un gilipollas cuando veo de quien es.

Anabelle.

Y joder, todo mi cuerpo responde a un simple nombre en una pantalla. Mi polla se endurece y el macho vinculado quiere salir corriendo para llevársela bien lejos.

Me contento con aplacar a mi entrepierna dándole un fuerte golpe a ver si se le bajan los "ánimos" y a abrir el mensaje.

Me quedo atónito.

¿ Vuelve a jugar conmigo..o es completamente sincera?

El macho vinculado quiere gritar y rugir...pero Zypher vendría a darme un par de ostias si me oye, y Syphon me las daría por asustar a Danikah. Mierda, se me olvida que vivo en compañía.

Sonrio de lado. Me lo tomaré como que es sincera y realmente me quiere a su lado.

Tecleo rápido y pulso después enviar. Soy bastante nuevo en esto de enviar mensajes, pero la tecnologia nunca se me ha dado mal. Las relaciones con las hembras tampoco...pero Anabelle es especial.

" No  ha sido un sueño, porque si lo hubiera sido yo sería el macho mas desdichado del planeta."


ANABELLE

*El teléfono vuelve a sonar sobresaltándome, una sonrisa suave aparece en mi rostro cuando leo la respuesta de Throe.

Mi corazón salta feliz con sus palabras y la calidez invade mi pecho, muerdo mi labio inferior pensando una respuesta. Realmente deseaba que estuviera envolviendo mi cuerpo con sus brazos en este momento, mis dedos se mueven casi por voluntad propia. No lo iba a presionar ni forzar mas las cosas, me conformaría con ir poco a poco*

 "Ahora que me dices que no es un sueño me queda solo pedir deseos Throe, pero los diré en voz alta...frente a tí mañana. Buenas noches futuro hellren "

Desavenencias. Zypher & Throe.

Viene de aqui

THROE:
*Me planto frente a la nevera y aun no consigo habituarme a que este en medio de una  enorme enorme, llena de muebles de último modelo con lo mejor del mundo; comida dentro. Todo gracias al dinero de Anabelle. Por fin vivimos en un lugar en el que no corren las alimañas por el suelo... y lo que tanto tiempo había echado de menos, ahora se me vuelve extraño.

Cojo una cerveza y la abro con el abridor incorporado en la nevera. La verdad, estos adelantos del siglo veintiuno son de lo mejor. Apenas me doy la vuelta, detecto la presencia de mi trahyner. Sonrío de lado, a saber cuánto tiempo lleva detrás de mí. Ya podría usar ese sigilo cuando salimos a cazar y la caga revelando su posición por impetuoso. Abro de nuevo el frigorífico de dos puertas y cojo otra botella.*

- ¿Vas a acompañarme o simplemente estás observando mi maravilloso culo? -



ZYPHER:
-Si tuviera que mirar tu culo durante mucho rato, creo que me quedaría ciego.

* Ando hacia la nevera y saco una cerveza, destapando la anilla con los dientes y miro la súper cocina.

Aprieto los dientes callándome, porque tengo ganas de gritar.

Siempre he deseado un hogar, pero conseguirlo de esta manera no es lo que yo quería y me siento en una de las sillas, mirando a Throe fijamente.*

- Bonita casa... -

* Intento sonar agradable, pero sé que Throe nota mi incomodidad por la forma en que me mira.*



THROE
*Elevo una ceja ante su actitud. Que no haya querido la cerveza que le ofrecía, no me extraña...él y sus rarezas; pero que me hable de la casa justo en este momento y me mire como si le debiera algo...*

- Escúpelo de una puta vez. ¿Qué le pasa a la casa y que te pasa a ti? No me engañas con esa interpretación de modales que ni te molestas en disimular -

¿ Y ahora? Anabelle .

Viene de aqui

*No había podido dormir luego que Throe se marchara.

Sin que nadie me viera,  me escabullí a mi habitación, me dirigí al cuarto de baño dejando caer por el camino la manta con la que  él  había envuelto mi cuerpo.

Observé en silencio perdida en mis pensamientos cómo se llenaba la bañera y el agua tililaba al caer en el fondo.Cuando estuvo llena,  me sumergí dejando que el agua envolviera mi cuerpo.

Suspiré de gusto cuando su suave caricia alivió algunas partes de mi cuerpo levemente doloridas y una sonrisa se dibujó en mi rostro al recordar cada momento de la noche.

Throe.

Su cuerpo, sus besos, sus caricias, su aroma estaba en mi cuerpo y yo me sentía la hembra más feliz, más aún con sus palabras de despedida que me llenaron de esperanza. Por fin era suya, en cuerpo y alma y  ni siquiera en mis sueños imaginé que se podía sentir tanto, sentir que se podía pertenecer tanto a alguien.

¿Qué pasaría ahora?